Tania Cruz es la primera trans femenina del Ecuador que se atreve a reclamar sus derechos constitucionales para regresar al colegio -que abandonó en primer curso, cuando iniciaba su proceso de cambio de género- y, finalmente, después de recibir la asesoría legal de dos instituciones públicas, logra vestir la falda plisada con blusa blanca de botones que la institución militar reserva para los cuerpos femeninos.
Devota de la Narcisa de Jesús, se persigna frente a su imagen antes de salir al colegio, donde inicialmente le pidieron “Que se vista como hombre” para que pueda estudiar.
Mientras explica el caso, María José Fernández, delegada provincial de la Defensoría del Pueblo en Guayas, sostiene un ejemplar de la Constitución, encuadernado en rojo, que establece las responsabilidades de la institución en la que trabaja.
“Este hecho podría constituir una discriminación por identidad de género, lo que contraría lo señalado en los artículos 11, numeral 2; y artículo 66, numerales 2, 4, 5, 9 y 25 de la Constitución, norma suprema y prevalente sobre todo el ordenamiento jurídico del Ecuador”, escribió la abogada Fernández en el oficio que envió al Director Provincial de Salud.